Dulce locura.

Y ahora me vuelvo loca y te beso, y luego me pongo a bailar swing en ropa interior por IFA mientras tiro gominolas a la gente, y luego me vuelvo loca otra vez y te digo, chillando con todas mis fuerzas que te quiero y te re quiero, para después salir corriendo y tirarme delante de la primera moto que vea para entrar en una iglesia a lomos de Tom Hanks y decir: ¡Esto es esparta! Para que luego, me metan en la cárcel por matar cien palomas de colores y cuando vengas a visitarme, decirte que te necesito a ti y sólo a ti, que te necesito aquí conmigo para que soportes a mi locura, y de paso, que me soportes a mi entera.
*Luego quemo la cárcel y me tiro al gato de la entrada que me mira con deseo.