viernes, 27 de diciembre de 2013

El cinismo de las bestias.

La devastación del ser humano puede considerarse una forma de holocausto hacia lo de todos. 
Y al final, todos lloramos cuando vemos morir algo que queremos.
¿Y si queremos al árbol que vemos desde nuestra ventana?
Y su vida se va consumiendo.
En cada página que pasas.
Y cada página.
Es una lágrima.
Y cada lágrima.
Devastación.

¿Precipitaciones por el mar de tus ojos, dices?

La parte más triste de todas las noches es cuando el cielo deja de estar estrellado a secas, para estrellarse sobre mí en un intento de venganza por dejar que te marches.
Supongo que nuestros cuerpos encajan demasiado bien para separarse. Y cuando te vas, mi piel deja ese color blanco nuclear y se vuelve un tanto gris. Como las nubes, cuando las gotas de lluvia ya no quieren estar con ellas, y prefieren suicidarse, precipitándose desde lo más alto.
Entonces, mi cuerpo se divide y mi piel me mira desde la otra parte de la cama, bastante esquiva, recordándome que te necesita. Ilusa, como si no lo supiera. 

Conclusión: lee.


viernes, 27 de septiembre de 2013

A veces, lo mejor que tenemos se va de golpe sin que podamos convencerle para que se quede un rato más. 
Otras, en cambio, vemos como se va alejando de nuestro lado, dejando un rastro ocre como de triste melancolía mezclada con la última botella de vino de un alcohólico para recordarnos, una vez más, que no va a volver. Como una flor arrancada a la que intentamos conservar en un vaso de agua, que se va marchitando y de repente, ya no recuerda que antes era de un color alegre, parecido a la esperanza. 
Y sinceramente, amigo, es una mierda.

martes, 17 de septiembre de 2013

Cerrar paréntesis.

Decidió cerrar la puerta de su habitación y quedarse a solas con su soledad para pasar unas risas con ellas. 
Pretendía preguntarle tantas cosas que al final no obtuvo ninguna respuesta y volvió a dejarse llevar por el mismo silencio perturbador de siempre.
Y allí se quedaba la puta soledad, partiéndose el culo de él. 

miércoles, 10 de julio de 2013

Quizá era de esa clase de personas con los sueños rotos y la mirada perdida.
Quizá estaba esperando que alguien la llevara a casa.
Quizá nadie pudo llevarla y se perdió por el camino.
Quizá el camino la cambió.
Quizá él fue su camino.


carta de un suicida asustado

La vida da segundas oportunidades a quienes quieren aceptarlas. ¿Y yo? Yo siempre fui un cobarde, tú lo sabes bien. Y por el miedo al dolor no amé hasta el extremo, y por el miedo a fracasar no arriesgué la cómoda estabilidad. Y mi felicidad, que era tan nula como mis ganas de seguir aquí ahora, tambaleaba como un pájaro herido. En esta habitación infesta de decepciones que me roban el aire, comprendo que me faltan muchos y me sobran otros tantos. Y cuando me pongo a hablar cara a cara con una vieja amiga vestida de temor, me mira con ojos llorosos y vuelve a despedirse de mí porque sabe que no voy a ser capaz de separarme de lo poco que me queda en este mundo devastado por la tristeza. De mí. 

miércoles, 26 de junio de 2013

"Cuando has querido a alguien, nunca lo olvidas.
Sigues adelante, porque es lo que hay que hacer, pero lo llevas siempre contigo en el corazón."


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Llevo desde los diez años escribiendo. No tengo ni libro ni canción favorita. Tampoco tengo ninguna virtud que cabe destacar ni nada fuera de lo normal. Cuando me inspiro, cojo lo que sea para escribir y lo suelto todo. Dudo que más de 5 personas conozcan este blog. Tengo casi dieciséis años y justamente hoy me he dado cuenta de que no escribo más que tonterías: historias de amor que acaban mal, que acaban bien o que ni si quiera acaban. Jamás he escrito sobre las injusticias de este mundo o sobre las cosas del día a día, ya sabéis, la rutina de todo ser humano. Eso que apreciamos cuando ya no está. Quiero decir, ¿quién te asegura que mañana los volverás a ver? A los tuyos, digo. ¿Qué padre puede saber con toda seguridad que al despertarse para ir a trabajar sus hijos seguirán ahí durmiendo? ¿Qué persona, ya sea padre, hermano, hijo, sobrino o amigo, puede saber a ciencia cierta que jamás se quedará solo? ¿Acaso sabéis cuando los vais a perder? 

domingo, 23 de junio de 2013

Non, je ne regrette rien

Llorar abrazada a tu olor se convirtió en rutina, y ya nada era más abrumador ni más bonito.
Y sentir que tus caricias se resbalaban por mis manos como las gotas de ese perfume que guardé en algún sitio, dentro de mí.
Si querer también es relativo, puede que la cordura se fue cuando cayeron las primeras lágrimas, las primeras hojas rotas. 

Algún día puede que recuerdes que existí algún tiempo dentro de ti, que era tan punzante como mirar el Sol de frente. Puede que vuelvas. Puede que te quedes. Que desaparezcas. No importa. Después de ese dolor, soportaría otros golpes, otras cicatrices, otras mentiras y algún que otro roto. 

miércoles, 8 de mayo de 2013

Ahora, todo oscuridad.

Quisiste que se quedara junto a ti, ¿eh?
Te encuentras tan solo en este mismo instante que en tu cabeza los recuerdos se amontonan unos encima de otros, y se asfixian entre ellos a la vez que tú dejas que te inunden. 
Sus labios ya no te quitan el aire pero te falta igualmente.
Ya no te ahogas en sus ojos pero no sabes encontrar el camino a casa sin la luz de estos.
Y piensas, una vez más, en los momentos no vividos. 
Sólo se te ocurre pensar y pensar. Mientras dejas que la habitación en la que te encuentras se llene de tu angustia y te encierre en ti mismo para siempre. 
A veces, incluso, abres los ojos y respiras hondo, llenando tus pulmones de aire. De vida. 
¿Aire? ¿Vida?
Aire era cuando lo respirabas tú.
Vida cuando estabas conmigo.

sábado, 4 de mayo de 2013

Tristeza, dices...

      Que las lágrimas lloren ya es la gota que colma el vaso.
Tristeza, ¿dices? Tristeza eres tú cuando miras fijamente al cielo
esperando hablar con Dios, sin saber que murió hace 
mucho tiempo.
Tristeza es un abrazo igual de roto que tu sonrisa. 
Es ausencia de algo.
Ausencia de todo.
Ausencia de ti.


viernes, 26 de abril de 2013

En su cara sólo distinguía lágrimas y algún que otro lunar. Al igual no era tan fuerte como pensaba, y toda la mierda de este mundo podía calarle hasta el tuétano, haciendo que se pudriese por dentro, devorando lo poco que quedaba de ella. 
Ya no se veía capaz de volar o acariciar con la yema de los dedos el cielo, le resultaba un logro sonreír una vez a la semana.
Y las noches, las noches eran lo peor. Como si el Coco hubiera salido de los cuentos para atemorizarla con su actitud tosca. Sabía que los besos ya no ayudarían, que no había perdones que valiesen, se hundía. 
Y EN LA MÁS ABSOLUTA OSCURIDAD ni encontró un faro ni una luz ni una mano amiga. 
¿Qué encontró en la oscuridad?
Simplemente eso. Oscuridad. 

domingo, 14 de abril de 2013

Es como si el charco salado que se crea a mis pies cada vez que te alejas lo utilizases para hacerte unos largos.
Ese nadador de mis lágrimas cínico que me traspasa, ese sentimiento de no pertenecer a otro sitio más que a tus brazos, esas ganas de hacer algo con tus caricias. 
Tus caricias que me imagino. 
Tus caricias inexistentes.


sábado, 6 de abril de 2013

Att: Piezas.

"A veces, 
solo a veces; 
el viento de abril, 
con su espalda de lluvia, 
roza la cara de la ciudad. 

Pensando en ti todo encaja otra vez; 
pensando en ti todo encaja otra vez, 
soy como un puzzle en tus manos, 
pedazos de noche que vuelven. 

Sigo el rastro de días mejores, 
como piezas de vida, 
en las manos de un viento dulce. 
Soy como un puzzle en tus manos, 
pedazos de noche que vuelven, 
a casa. 

A veces encuentro el camino de vuelta 
en tus ojos, tranquilos. 
Sigo el camino en tus ojos tranquilos, 
de vuelta a casa."

jueves, 4 de abril de 2013

Planearé una huida.

Girarme cuando miro al frente y sentir que tu sonrisa se clava en mi nuca también puede considerarse una maravilla.
O sentir que me dices que me echas de menos con la mirada una forma de leerme por dentro. 
Odio que el espejo se ría de mí y se aproveche de que ya no miro para apuñalarme y dejarme medio rota, moribunda en el suelo. Ni si quiera me remata y me recuerda a ti, ¿sabes? 
Y ahí me quedo. Desangrándome con cristales y tu puñetero recuerdo hincado en el hígado, mirando como ese culo se aleja. 
Y entonces te giras y simplemente me miras por un microsegundo como diciendo "espero que disfrutes de mi  partida". 
Entonces, un sentimiento rebota dentro de mí. Eso que provoca tu mirada. Tú. 

Cuando te miraba era capaz de verlo todo.  A veces estar ciego no ayuda a ser feliz. Y mentirte a ti mismo está demasiado visto, habla con el que lleva todos los mecanismos que te empujan a besarla y deja claro las cosas. 
Si decides tirarte por aquel precipicio y estamparte contra las rocas, que ya no son un sitio para las caricias y los murmullos, hazlo con el temor hacia lo desconocido y no con el temor hacia no encontrar lo que buscas.
Al fin y al cabo, lo que buscas puede estar en una mente trastornada, desquiciada por el eco de una fragancia que no descansa en tus sábanas, o en un pelo que ya no contiene nada tuyo porque no lo es.

Puedes... no sé, intenta hacer algo distinto a lo que te proponías. Cambia esa sensación. Percibe otra vez su voz. Inúndate de su imagen. 

Todo lo que siento por ti.


martes, 2 de abril de 2013

Declive.

 
Vivía más segura en la mentira de tu voz. Aquí fuera hasta los árboles, cínicos, como siempre, 
se ríen de mi situación devastadora. Yo nunca fui de jaulas ni barrotes, no me gustan las esposas ni cuerdas, pero enredada en tus brazos y atada a tus labios me sentía más o menos bien, luego pensaba qué sería soltarme entre cerezos en flor y lobos hambrientos. Y volvía hacia mi interior, chillando en cada rincón unas palabras huecas que me permitían alcanzar un sentimiento punzante. Tú.

Seré la palmera que se dobla pero aguanta el huracán.

Me bajaré al infierno y cuando suba estaré a bajo cero, para que cuando vuelvan a tocarme, o a mirarme, vean el frío de mi alma, que no se calienta ni con el amor más puro. 

Voy a romper las ventanas----------

CUANDO

VUELVAS
YO
ESTARÉ
TAN
L                           E                              J                        O                       S
QUE
NO
PODRÁS
NI
RESPIRAR
MI
                                                             OLOR.

Att: Alguien que está cansado de esta mierda.








lunes, 1 de abril de 2013

DEFICIENCIAS MENTALES


Cuando pasaste por mi lado y me rozaste la piel en mi cabeza comenzó un holocausto de sentimientos. Los delirios obscenos que pensaba que jamás influirían en mi respiración comenzaron a bramar por cada poro de mi piel impidiendo marcharme de tu lado.
En la más absoluta concupiscencia que recorría mi cuerpo, ya destrozado por unos sentimientos pasados, encontré tu mirada perdida entre piernas y otras miradas deshonestas. Pero tú no. Tú eres noble. 
Y esta situación acaba como cuando las nubes van abandonando el cielo para perderse quién sabe dónde, cuándo o cómo. Pero la más pura de las miradas seguirá mirándome. Hasta que las nubes vuelvan o se disuelvan o yo qué sé. No arriesgo a arriesgar, la primavera siempre se acaba y las flores se marchitan. 
Mírame.

martes, 5 de marzo de 2013

Abrí los ojos en medio de una oscuridad penetrante con el simple escalofrío de los recuerdos olvidados. 
Recibí una bofetada con sabor a "puede que ya no vuelva". 
¿Es tarde para afirmarlo o quizá demasiado pronto?
Cuando el presente me abruma y consume ya nada de lo que quedó una vez en mí

está presente ahora fluyendo por el aire como estos pensamientos.
Y como ellas, tus caricias caen y caen a un abismo increíble 
casi comparable con la frialdad de tu mirada cálida.

Pero al igual queda algo de blanco en este cielo gris que ilumina la humanidad más putrefacta. 
O no.
A lo mejor ya nadie puede salvarme.
Y por mucho que trepe en un irónico y desesperado intento por huir de tu voz por aquellos muros de ausencia, 
lo único a conseguir será el silencio de los cuervos 
que me miran con el infinito deseo que tú no quieres tenerme.

jueves, 21 de febrero de 2013

martes, 22 de enero de 2013

FREE

No te das cuenta pero el viento a veces sopla fuerte para llevarse con él los recuerdos que no se volverán a repetir. 
¿No se llevó los tuyos? ¿Se quedaron los malos recuerdos para corroborar tu agonía? Prueba a soltarlos. 

"Yo no soy antisistema, el sistema es antiyo"

 <<¿Vives para ti o para los demás? ¿Haces lo que quieres cuando quieres? ¿Alguna vez te has parado a mirar el cielo mientas llueve y te mojas? ¿Has sentido la música tan fuerte que te han dado ganas de llorar? ¿Te has sentido diferente? ¿Te has dejado llevar por tus pensamientos imaginando cosas sin sentido? Sé feliz, vive, cumple tus propias normas y vuela. Deja que fluya.>>

Más bello que la risa cínica de un cuervo que de mi se alimenta.

Miraba a mi al rededor y lo único que veía eran sombras compuestas por resquicios de humanidad.
Dime, ¿cuándo dejamos de tener esperanza en nosotros mismos? ¿Alguna vez la tuvimos?
¿La tuviste tú en mi?
Dejaba que me tragase la más profunda angustia de verte sonreír. Pero piénsalo, no es más ilógico que el amor. Girarte y ver una sombra. Eso es lo que me has proporcionado. Siéntete orgulloso. Me enamoré de una puta sombra, imagínate si me hubiera enamorado de tu verdadero yo.
¿Recuerdas cuando te decía que yo era como un pájaro? ¿Que nada ni nadie podría atarme o encerrarme? Era cierto. Pero como pájaro, iba comiendo las migas de pan que tirabas, hasta entrar por mi misma en tu jaula. Donde jamás quise salir y donde no sé si sigo aún. 


domingo, 20 de enero de 2013

Odio hasta el puto lado de la cama en el que te acurrucabas.
Me solía girar para asegurarme de que aún estabas ahí, mirándome de reojo con inseguridad que no debías tener.
Es que tú eras capaz de comerte el mundo con la mirada, ¿sabes? Me devorabas a mi entera. Me desnudabas sin apenas tocarme. 
Solías besarme con la mirada.
¿Alguien capaz? 
Mutilaré a los farsantes que intenten ocupar tu lugar de la cama y vagamente te imiten, produciendo risa. Porque más que mariposas, lo que dejaste en mi barriga fueron larvas que se alimentan de unos resquicios de tu olor en mi colchón. 
Odio hasta el puto lado de la cama en el que te acurrucabas.
Y me la pela que ya no estés, la verdad. O no. ¿Yo qué mierda sé? 

¿Me vas a decir a mi qué es posible y qué no?
¿Quieres decirme que un puto osito de peluche y unas flores o chocolate van a arreglar algo que ya está roto? O un perdón. 
A mi me sobra con una sonrisa, ¿sabes? Pero a penas sabes a qué me refiero cuando cito tu nombre en algún libro. O en alguna canción. Todo en mi cabeza. 
Siempre he querido ser algo así como el oxígeno que te rodea, como si pudiera abrazarte, y me mira desafiante como diciendo "Jódete, ya nada será como antes." 
Y quizás le escuche y retroceda. Pero no saltaré. Porque tras ese salto, no estarás tú. Nunca lo has estado.

martes, 1 de enero de 2013

Quemaría agua por ti.

"¿Estás ahí aún o te has marchado ya? ¿Tus caricias aún se sienten en algún rincón de esta ciudad?
Piensa que al igual dejaron huella. Pero no, eso no lo pienses.
Al igual que no piensas que yo quemaría agua por ti, ¿sabes? Y mojaría el fuego, también, con tal de encender aquella llama fría e inerte, que me congela.
¿Te cuento un secreto? Nunca pensé que sentiría la necesidad de desaparecer, y a día de hoy, lo único que espero y a la vez espero que no, es que lo hagas tú o perderé la puta cabeza.
¿Quieres otro secreto? Ahí va: te quiero, gilipollas."
Mensaje de voz Nº 16.

Dulce locura.

Dulce locura.